Ser avalista de alguien es más común de lo que parece y ello conlleva ciertas implicaciones y responsabilidades. Sin embargo, hay una pregunta muy recurrente entre las personas que avalan y es: ¿Si soy avalista puedo pedir un préstamo?
Despejamos tus dudas a continuación.
¿Qué es un avalista?
Un avalista es una persona que se hace responsable de pagar la deuda de otra persona en caso de que ésta no pueda hacerlo.
Por lo general, se exige un avalista cuando la persona que solicita un préstamo no tiene suficiente historial crediticio o no tiene los recursos necesarios para demostrar que puede reembolsar el préstamo.
Así, el avalista actúa como una especie de «garantía» para el prestamista, ya que si el prestatario no puede devolver el préstamo, el prestamista puede recurrir al avalista para obtener el dinero prestado.
Por tanto, ser avalista es una responsabilidad y no debe tomarse a la ligera.
¿Si soy avalista puedo pedir un préstamo?
Sí, es posible que puedas solicitar un préstamo si eres avalista. En general, ser avalista significa que te haces responsable de pagar la deuda de otra persona en caso de que ésta no pueda hacerlo.
Cuando solicitas un préstamo, el prestamista evaluará tu historial crediticio y tu capacidad de reembolso para determinar si eres apto para obtener el préstamo. Si eres avalista, el prestamista también puede evaluar tu situación financiera para determinar si eres apto para hacerte responsable de la deuda del prestatario.
Si el prestamista determina que tienes un buen historial crediticio y una buena capacidad de reembolso, es posible que puedas obtener el préstamo, aunque seas avalista.
Es importante tener en cuenta que ser avalista es una responsabilidad importante y no es algo que deba tomarse a la ligera. Asegúrate de comprender bien tus obligaciones y compromisos antes de hacerte avalista de alguien.